Una estudiante estadounidense decidió llegar a su graduación de una manera muy peculiar que dejó sorprendidos a sus compañeros.
Alexandrea Clark de la secundaria de Georgia, Estados Unidos, arribó a la celebración en una carroza fúnebre mientras ella se encontraba dentro de un ataúd el cual fue transportado por hombres vestidos de negro hasta el lugar donde se hallaban los compañeros de la chica.
Clarck salió del féretro frente a los asistentes que miraban confundidos la escena.
Según las palabras de la joven, se animó a realizar la peculiar acción para concientizar a los estudiantes sobre el consumo de drogas tras las celebraciones.
También agregó que consiguió el equipo necesario en una funeraria donde actualmente colabora.